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Compañía teatral de presos inicia inédita gira en México

Los creadores de Cabaret Pánico son once internos que purgan condenas hasta por 60 años por los delitos de asesinato, violación o secuestro.

AFP
Publicado: 02/03/2010 10:33

México, DF. Once presos considerados de alta peligrosidad han empezado una inédita gira artística por seis reclusorios de la capital mexicana presentando Cabaret Pánico, un espectáculo en el que se mezclan culpa, rabia y dignidad.

Sus creadores e intérpretes son Michel, El Rivas, El Negro, Machorro, Joselito, El Greñas, Mares, Chi Uck, El Lic, Isra y Fidel, la mayoría de los cuales pena entre 30 y 60 años de prisión por asesinato, violación o secuestro.

Hace un año pidieron que se les organizara un taller de teatro en su penitenciaría y de las clases, dirigidas por Itari Marta, salió esta pieza que pone encima del escenario la crueldad de sus crímenes y la fuerza de sus remordimientos.

La base de los textos, explica Marta a la AFP, se encuentra en la obra del autor chileno Alejandro Jodorowsky, conocido por su teoría de la sanación del espíritu a través del arte.

"Normalmente las obras que se representan en penitenciarías son puro entretenimiento. Este es un material esencial de la vida", asegura la directora y actriz teatral.

La violencia ocupa un lugar central en los primeros actos de Cabaret Pánico, como cuando uno de los presos, vestido como todos con frac negro y pajarita y cinturón rojo, se lleva una buena paliza porque se niega a cometer un asesinato.

La intensidad con que los actores se golpean causa algún sangrado en la nariz pero las amenazas se baten poco a poco en retirada ante la reflexión y la búsqueda desesperada de la redención.

"Volteo hacia atrás y me pregunto qué he hecho (...) Pero ya me perdoné. Aquí empieza mi vida y aquí empieza mi cuento", clama uno de los presos en la obra.

Aunque hay a quien las confesiones le impactan hasta el llanto, la mayoría de las decenas de reas que presenciaron el espectáculo el pasado fin de semana parecen más involucradas por su ágil puesta en escena que se desarrolla entre dos escenarios.

"Hay quien capta el sentido y quien no lo capta", reconoció a AFP Jorge Barrueta (Michel), uno de los actores, tras la función en el reclusorio femenino Santa Martha Acatitla.

Esta fue la segunda fecha de la gira que desplegarán los 11 presos hasta principios de abril por seis diferentes reclusorios, algo totalmente inédito en México, que sufre problemas de seguridad en sus superpobladas cárceles.

Detrás del escenario, los reos dejan claro que esta iniciativa no puede redimirles del horror que consumaron ni mucho menos aliviar el dolor de sus víctimas.

"Lo que quiero demostrar es que sí hay una responsabilidad. Que soy autocrítico y transparente. Con el teatro logro recordar cada momento del secuestro que cometí y eso me ayuda a liberarme. También ayuda a mis hijos y a mi familia porque les ofrezco confianza y una disculpa", explica Barrueta.

"La pena de muerte no restructura a la sociedad. Sí lo hace que ellos digan su verdad, cómo llegaron a eso desde su entorno de violencia", reflexiona la directora, de 32 años.

Marta, también codirectora del centro cultural Foro Shakespeare -organizador y difusor de la obra-, asegura que en los ensayos encontró "la misma dificultad que con otros actores, si bien los límites aquí son un poco más sutiles. Hay que medir el agua para no llevarles a un estado de ebullición".

El Foro Shakespeare, que no ha recibido ayuda pública en este proyecto, prepara un documental sobre la experiencia y quiere afianzar la compañía de presos, que ya explora adentrarse en el Ricardo III, del bardo inglés.